El sitio más dulce de mi casa

Esta mañana, desde la mecedora del cuarto de mi bebé pensé e hice mis notas para este post.
Es el rincón más planeado y esperado de la casa. Lleno de detalles que preparamos con gran ilusión durante todo el embarazo.

Pareciera que ese periodo de nueve meses estuviese perfectamente diseñado para darnos el espacio de ajustar y cambiar todo lo que necesitamos en nosotros para poder recibir a una nueva vida. Es obvio que biológicamente es así, lo vemos en los cambios de la mamá, y el desarrollo del bebito desde embrión hasta ser una persona capaz de adaptarse al ambiente extra-uterino. Pero también me refiero al aspecto mental y espiritual; se necesita mucha paz en el corazón para poder acoger con sencillez y amor a un bebé. Según mi punto de vista, requiere despojarnos de muchos apegos al mundo, a los "problemas", preocupaciones y angustias. Lo bueno es que si no logramos superar todo eso en los nueve meses, el encontrarnos con esta personita instantáneamente genera una transformación inminente en nosotros. Puede sonar a cliché pero definitivamente hay un antes y un después; este es un punto de inflexión único en nuestras vidas.

A veces nuestra ansiedad por la meta nos distrae la atención que necesitamos para disfrutar la espera. La espera nos regala la oportunidad de prepararnos y vivir ese proceso que es tan importante como la meta en sí misma.

Hoy disfruto cada detalle de este cuarto porque cada uno recoge tanta historia y alegría.

Algunos de los detalles:

• Virgen de Guadalupe - tiene dos, una traída por su madrina desde México, tierra de la morenita; y la otra la mandamos a imprimir en un lienzo
• Letras de "Juan Diego" y letras de "Bondad" - mandadas por su tía y las de Bondad forradas a mano con papeles hermosos de Scrapbook
• Avión y nubes - diseñado y rotulado por papi con ayuda de Omar
• Mecedora beige - buscada en cada una de las tiendas de Panamá, hasta encontrar la que combinara perfectamente y que fuese muy cómoda para todos los largos ratos de amamantar que sabíamos vendrían y que mami esperaba con ansias
• Lámpara de helicóptero - fue la tercera que compramos. Las dos anteriores se nos cayeron y rompieron instalándolas :S
• Cojines de Kalosh - buscados en el infinito y más allá, hasta ubicar los más blancos y acolchados del planeta :)

Gracias por visitar hoy el rincón más acogedor de nuestro hogar,
Ruly